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Sonetos II

by - 19:34

Indecisión 

Oscurece en mi patética vida,
se nubla por esta oscuridad mía.
Helando entera esta existencia impía,
herida con la indecisión temida,

Lúgubre es el encierro, sin salida.
Envuelto en una tristeza fría.
¿Hay persona que en mi ocaso se ría?
¿Existe quién disfrute de mi herida?

Bendita muerte, pareces consuelo.
Bendita ella, por la que muero.
Bendito dolor al caer al suelo.

Pero siendo sagrado el mundo entero,
algunas aves no levantan vuelo.
Benditas condenadas a este encierro.












































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